Mi hermano Kike



Mi hermano Kike era músico. Nació el 16 de febrero de 1936 y era 15 años mayor que yo (arriba, en la foto, está en sus 29). Estudió musica en el Conservatorio Nacional de Chile. Era tenor, tocaba piano, guitarra, flauta transversa y acordeón. Estudio en el Colegio Santa Rosa, de Chosica, Promoción 1954 (abajo, en la foto)


Él fue quien me dio mi primera -y única- verdadera clase de piano. Me enseñó una técnica básica para acompañarme con la mano izquierda, y tres acordes para la mano derecha. "Cuando aprendas a hacer esto -dijo- te enseñaré más". De modo que me puse a practicar y practicar y practicar hasta logré coordinar las dos manos. Pero en 1958 viajó a Estados Unidos y no regresó (salvo en 1967, por unos días, cuando falleció nuestro padre). Se retiró de la música y nunca más habló de ello.

Lo interesante no eran las notas ni los acordes, aunque de hecho me parecían impactantes, sino el ritmo, que hacían que mis huesos se sacudieran al compás. Si escuchas "Sueño de amor" y prestas atención al piano, te puedes dar una idea de cómo sonaban los acordes que me enseñó. No es exactamente igual, sino una adaptación de aquel ritmo que aprendí. Nada mal para ser mi primera y única clase productiva de piano.
.
Una vez, le dieron el premio a La Mejor Canción del Año, de Guido Monteverde, por su tema "El Llavero Y Mi Corazón" (1964), que grabó con el bonito arreglo musical de Enrique Lynch (foto izq.). Me hubiera gustado saber quién tocó el saxo. En 1968, Henry Stephen grabó "Mi limón mi limonero" usando un coro de estilo similar.

En este link hay otra canción cantada por Kike, "Jamás podré olvidar", de Leo Dan, subida por uno de sus fans. Se deja oír bien.

Cuando viajé a Estados Unidos para visitar a mi hermana Carmela, la mayor de todos, Kike me compró una bonita guitarra, pero no me la entregó porque le gustó tanto que simplemente me dijo: "Después te mandaré otra". Nunca me la mandó, jajajaja. ¡Se pasó! Estoy seguro de que no fue porque no quiso, sino porque siempre andaba apretado.

Gracias a Dios que vivió para recibir una copia que le envié del LPZulu. Su positivo comentario fue: "¡No sabes lo que has hecho!". Se refería a que le había gustado mucho. Recibió con mucho beneplácito mi disco y me deseó muchos éxitos. Tamaña su sorpresa cuando, poco después, se enteró de que rescindí mi contrato con IEMPSA. (Abajo: Mi hermana mayor, Carmela, mi madre y Kike, el tercero de mis hermanos, en USA)


Entonces me escribió una carta muy sentida, en la que me decía, en tono diferente: "No sabes lo que estás haciendo, hijo. No estás consciente de lo que estás dejando. No sabes cuánto lo lamento, porque aquí te estamos esperando para que continúes con tu obra y hagas de la música tu carrera". No imaginó que casi 50 años después desenterrarían mi disco en España y lo relanzarían para venderlo en todo el planeta por Internet.

Su comentario reflejaba lo que muchos me decían. Recibí una enorme presión social. Pero yo había madurado y no me nutría del qué dirán. Aunque él era mi hermano mayor, lo respetaba, y su influencia musical y personal fue clave en mi desarrollo, no me inmuté. Tomé una decisión de la que nunca me arrepentí. Soy una persona de principios y no me dejaba llevar por la presión social. Supongo que otro se hubiera derrumbado al primer soplido de una crítica así.

Hoy Kike no está entre nosotros. Pero sus palabras siempre resonarán en mi mente como un eco de su frustración. Refiriéndose a algunos de mis arreglos musicales del LPZulu, una vez me dijo: "No sabes el potencial que tienes. Si así estás empezando, imagina lo que será de aquí a unos años". Creo que nunca me perdonó que vendiera mi piano y dejara de cantar profesionalmente.

Sin embargo, él no solo me inició en el campo de la música, sino en el de la filosofía oriental y el pensamiento creativo. Quizás por eso mis canciones son tan diferentes, la una de la otra. Algunos dicen que mi disco fue ecléctico porque las canciones no encajaban en ningún molde. Era una mezcla.

Aunque no tengo grabaciones privadas de las hermosas interpretaciones que hacía Kike en piano y flauta, recuerdo que tambien tocaba muy bien el acordeón. Me gusta escuchar al gran italiano Paolo Bagnasco y recordar el precioso sonido de tan hermoso instrumento (búscalo en YouTube). Me imagino tumbado, tomando Sol en playa La Herradura de los años 60. Siempre pensé que la Embajada de Italia debió traer a Bagnasco de vez en cuando para deleitarnos con su música. De mi hermano Kike solo guardo buenos recuerdos.

Fue muy amigo de Guiche Suárez, tía del gran Pedro Suárez-Vértiz. Una mujer increíble, de oído absoluto. Cuando se enteró de que me había retirado, sus palabras de decepción se me incrustaron en el corazón como estacas. Poniéndome en su lugar, la comprendí.

¡Pero, como dije, yo sí sabía lo que había hecho! Lo medité profundamente. Como digo en otro lugar del blog, desde fines de 1974 he seguido pensando que fue la mejor decisión de mi vida. No me preocupa en absoluto que otros no alcancen a comprenderlo. Tendrían que estar en mi lugar. ¡Así es la vida!

Gracias al equipo de Sótano Beat pude actualizar una copia del 45RPM de El Llavero Y Mi Corazón. Y gracias a Heduardo, que colgó una versión bastante nítida del tema.

Con la vorágine de modernidad que vivimos a comienzos del siglo 21, sin duda solo los que pasamos nuestra tierna juventud a comienzos de los 60 podemos sintonizar todas las emociones maravillosas que nos hicieron vivir canciones tan lindas como las de aquellos tiempos. Cuando El Llavero y Mi Corazón salió al aire, todo el mundo simplemente se volcó a los discocentros para adquirirla. Fue un boom. Realmente hizo latir muchos corazones.

Kike falleció en el Piedmont Hospital a los 53 años en Atlanta, Georgia, USA. Fue enterrado en el Parkhill Cementery. Era Ingeniero Asistente en la Southern Engineering Co. de Atlanta.